Durante cuatro años ALPEC esta colectando datos sobre aves migratorias boreales en la región Caribe Colombiana. El monitoreo se realiza con metodologías estandarizadas en la estación del Campus de la Universidad del Magdalena, Santa Marta y en las Salinas Tasajeras, Ciénaga, adicionalmente en la Estación La Cumbre en la Sierra Nevada de Santa Marta.

Los resultados de los estudios confirman la importancia de la Sierra Nevada de Santa Marta como una isla continental, un oasis en las tierras bajas del Caribe Colombiano y la puerta de entrada para especies de aves migratorias en su camino a los Andes o al oriente de Sudamérica. En la eco-región se han registrado 132 especies de migratorias boreales en 18 familias, de éstas 58 son acuáticas. Para varias especies la eco-región es el único lugar de registros para Colombia.

Información sobre la fenología de migración fue colectada y analizada para cada especie; migratorias boreales terrestres están separadas en migratorias que se encuentran durante todo la época de migración en la eco-región (41 especies), en migratorias transeúntes (20 especies), que pasan el área durante su migración en otoño y primavera y migratorias, que se registran accidentalmente en el área (11 especies). La importancia de la eco-región para la conservación de aves migratorias demuestran los registros de 19 especies clasificadas como objeto de conservación en Estados Unidos basado en información de varios estudios, incluyendo análisis de las poblaciones de anidación durante 25 años.

El monitoreo aviar identificó la sensibilidad de las especies migratorias ante la destrucción y degradación de sus hábitats. Los indicadores de vulnerabilidad incluyen especialización al hábitat, preferencias para hábitats primarios y vulnerabilidad frente a la deforestación.