En las últimas décadas se ha detectado evidentes disminuciones y en algunos casos extinciones, de poblaciones de anfibios a nivel mundial.  Dichas disminuciones se han presentado en especies de todas las familias de anfibios, pero especialmente en aquellas asociadas a ambientes acuáticos en zonas montañosas . Estas repentinas desapariciones de especies montanas se notaron simultáneamente en varios  países. En algunas regiones, muchas de las disminuciones se dieron en hábitats aparentemente prístinos, lo cual indica que los declives no pueden ser explicados sencillamente por la destrucción de hábitat y este patrón de desapariciones sugiere que varios factores globales, individualmente o en sinergia puedan estar involucrados, entre estos: organismos patógenos, patrones inusuales de clima, introducción de especies y radiación ultravioleta.

Uno de los casos más críticos son las especies del género Atelopus (Ranas arlequines), de las 81 especies descritas y 32 aun desconocidas por la ciencia, 42 especies han experimentado disminuciones poblacionales, 61 especies con datos deficientes y solamente 10 especies mantienen poblaciones estables. Se ha sugerido que los factores que pueden estar incidiendo en el declive de las Ranas Arlequines son los siguientes: el hongo quitridio Batrachochytrium dendrobatidis (Bd), el cambio climático global, introducción de especies, la alteración de hábitat y el comercio ilegal y concluyeron que los factores con más importancia en el declive de este género, es el hongo quitridio  Batrachochytrium dendrobatidis (Bd) y  anomalías climáticas. El Bd es un hongo que produce Quitridiomicosis una enfermedad mortal para los anfibios y a sido asociado con declives en Norteamérica, Australia, Europa, Centroamérica  y Suramérica. Aunque se conoce que estos dos factores son los principales en el declive de este género, no se sabe con certeza si actúan individualmente o en sinergia. Debido a que algunos estudios sugieren que la consecuencia del cambio climático es directo, afectando la biología de los anfibios, otros sugieren una relación entre cambio climático y agentes patógenos, ya que  posiblemente los anfibios al estar en condiciones cálidas y  secas, pueden sufrir estrés y aumentar la susceptibilidad a la enfermedad.

Colombia es el país con más especies de ranas arlequines (Atelopus) con 45 en total y la mayoría se encuentra en algún grado de amenaza (IUCN). De estas doce se considera que están en un procesos de disminución, tres poblaciones se considera que están estables y treinta poblaciones no presentan dados suficiente que permita saber su estado actual. Si bien en el país ha aumentado el interés en estudios sobre disminución de anfibios, aun se desconoce las causas reales o los factores del declive de anfibios en Colombia, además hay muy pocos estudios sobre el estado poblacional de muchas especies de anfibios, que posiblemente estén disminuyendo. 

La  Sierra Nevada de Santa marta (S.N.S.M) posee un alto grado de endemismos de anfibios, entre estos se encuentran gran cantidad de especies en los géneros Bolitoglossa, Geobatrachus, Pristimantis, Centrolene, Colostethus, Cryptobatrachus y Atelopus, Para la S.N.S.M hay 5 especies endémicas del género Atelopus (A. laetissimus, A. nahumae, A. walkeri, A. carrekeri, y A. arseycue) las cuales están categorizadas como en Peligro Crítico (CR) segun la IUCN.

Estudios sobre el estado poblacional de las especies de Atelopus presentes en la Sierra Nevada de Santa Marta son muy pocos. Las especies que han sido un poco mas estudiadas son A. laetissimus,  y A. nahumae. Integrantes de ALPEC hasta el momento realizaronn una evaluación del estado de estas dos especies en el sector de San Lorenzo, encontrando unas poblaciones abundantes, además determinaron algunos factores de riesgos para estas especies (alteración de hábitat, introducción de especies y cambio climático). Se han iniciado proyectos para estudiar las condiciones de las otras tres especies de Atelopus (A. walkeri, A. carrekeri, y A. arseycue), solo se conocen desde sus descripciones y no han sido vistas en campo hace mas de 15 años. A ninguna especie de Atelopus presentes en la Sierra Nevada de Santa Marta, se le han realizados estudios sobre agente patógenos.